Finales del S. XX: “La satisfacción puede incrementar la productividad”. En mi punto de vista, estoy de acuerdo en que durante esta etapa ya se comenzara a brindar importancia al nivel de satisfacción de los empleados para que ambas partes logren sus objetivos. A raíz de esto las organizaciones toman en cuenta las necesidades, buscan mejorar las condiciones de trabajo, valorar el desempeño, mantener un buen clima laboral para que así el colaborador se sienta cómodo realizando sus actividades, llevando a que la productividad vaya en aumento. Si el empleado está a gusto, contento y animado mayor serán sus ganas de permanecer en la empresa y esto evitará que exista rotación de personal.